Soluciones para una implementación rápida: SAP Rapid Deployment Solutions (RDS)

Las soluciones de implantación rápida de SAP (Rapid Deployment Solutions, o RDS) son aplicaciones preconfiguradas que permiten a las empresas implantar SAP en unos pocos meses (o incluso en unas pocas semanas) por un precio fijo.

En esencia, las soluciones RDS consisten en una o varias licencias (el software) y soluciones predefinidas (el contenido) que se entregarán durante un periodo de tiempo acordado por un precio fijo (el servicio ofrecido). Por supuesto, también se incluyen la documentación y los manuales estándar.

Una RDS suele constar de dos contratos, uno para las licencias de software y otro para la implantación.

Normalmente, la solución más barata es comprar un RDS a uno de los “SAP Partners”, cientos de empresas independientes de todo el mundo especializadas en uno o varios aspectos del negocio y certificadas por SAP. Algunas de estas empresas asociadas ofrecen sus propios RDS – actualmente hay miles de RDS disponibles en el mercado.

¿Cuáles son las ventajas de estas soluciones estándar?

Rápida implementación: en algunos casos, los tiempos de implementación son inferiores a 6 meses o incluso 3 o 4 – en la práctica, en algunos escenarios, el tiempo se reduce a la mitad. El uso de soluciones en la nube puede simplificar aún más el proceso.

Costes reducidos: una consecuencia del uso de paquetes estándar y de la reducción de los plazos es el considerable ahorro que supone en comparación con la implantación tradicional de SAP “a medida”. Los costes de mantenimiento del sistema también suelen ser significativamente menores.

Menos errores: gracias al uso de un gran porcentaje de material estandarizado y probado, la posibilidad de errores se reduce al mínimo. Las desviaciones de las normas sólo se aplican cuando hay un claro valor añadido, es decir, que la diferenciación responde a una estrategia corporativa y añade “business value” (valor comercial).

Aplicación de las “mejores prácticas” (best practices): el punto de partida ya no son las necesidades de la empresa, sino sus desviaciones de lo que se considera “estándar” o “mejores prácticas” (las “mejores prácticas” que suelen dar los mejores resultados). Estas mejores prácticas son el resultado de casi 40 años de actividad de SAP y de las empresas de consultoría que trabajan con esta plataforma.

En la práctica, una “mejor práctica” consta de dos elementos:

1. Una descripción de lo que se considera el proceso estándar y una empresa estándar (Model Companies, o “empresas modelo”) en un área específica de una determinada industria (por ejemplo, cómo se gestionan los pedidos en una industria que produce bienes de consumo masivo)
2. Una descripción de cómo debe configurarse el software SAP para manejar el proceso estándar

Las mejores prácticas de SAP son un tema importante. Si está interesado, puede encontrar más información en este artículo sobre las best practices.