¿Qué significa Modelo Operativo Objetivo?

El Modelo Operativo Objetivo, en el despliegue de un software ERP, abarca personas, procesos y tecnología. Aquí aprenderás todo sobre él.

Cómo trabajar con un software ERP

Cuando se trabaja con un software ERP, sea cual sea nuestra función, siempre es necesario saber “por qué hacemos lo que hacemos”.

De hecho, saber el por qué puede ayudar a los directivos a comprender las ventajas de adoptar un nuevo software. También ayudará a los usuarios finales a cambiar su forma de trabajar, y a los consultores a configurarlo de la mejor manera.

Si la respuesta no está clara, surgirán varios problemas. Por ejemplo, los directivos no ayudarán a la implantación, los empleados se resistirán y seguirán utilizando los antiguos procesos. Además, las prioridades no estarán claras y los resultados de la implantación no se ajustarán a las necesidades de la empresa.

¿Qué hacer antes de implantar un ERP?

Antes de implantar un ERP como SAP, uno de los principales pasos es definir por qué es necesario un cambio. Se debe reconocer lo que la empresa no está haciendo y necesita empezar a hacer. Además de lo que está haciendo y necesita dejar de hacer.

Obviamente el cambio puede estar motivado por diversos factores, incluso concomitantes, tales como cambios legales y nuevas tecnologías. También aplican los cambios en el mercado en el que operamos (por ejemplo, la llegada de nuevos competidores) y otras cosas.

A menudo se trata de factores externos, pero también puede haber factores internos. Un ejemplo de factores internos es la necesidad de estandarizar y armonizar los procesos en una empresa de rápido crecimiento.

Otro es optimizar los costes de funcionamiento o ayudar a los directivos a analizar los parámetros clave de la empresa.

Descripción del Modelo Operativo Objetivo

Una vez definido el motivo del cambio, es posible responder a una pregunta. Esta es “¿cómo queremos que sea nuestra organización cuando el programa de implantación del ERP haya finalizado?”

Este ejercicio de definir el estado en el que nos gustaría que se encontrara la empresa tiene varios nombres en inglés. Como “business end state”, “strategy plan” y “Target Operating Model”.

El Modelo Operativo Objetivo (Target Operating Model) es una descripción de cómo nos gustaría que funcionara nuestra organización. En la práctica tiene tres componentes:

• Procesos: ¿Cuál es la mejor forma de trabajar? ¿Hay que centralizar o descentralizar los procesos? ¿Deben añadirse nuevos o modificarse los existentes? El documento que define los procesos tal y como deben ser se llama Lista Maestra de Procesos de Negocio.
• Personas: ¿Cuál es la mejor manera de organizar a las personas para que apoyen los procesos que queremos implantar? Es necesario definir cómo debe estructurarse la organización a distintos niveles (global, regional y local).
• Tecnología: ¿Cuáles son las mejores herramientas (hardware y software) para lograr el resultado deseado? ¿Qué actividades se pueden automatizar?

Procesos

Obviamente, el Modelo Operativo Objetivo no es un documento rígido e inflexible. Puesto que puede ser necesario adaptar ciertos procesos a las condiciones locales.

Por tanto, es necesario definir qué procesos se consideran globales y, por lo tanto, “intocables”. Para luego definir cuáles son locales y, por lo tanto, adaptables a las condiciones del mercado y a la forma de trabajar.

Lo ideal es que los procesos locales no sean totalmente independientes, sino que se ofrezcan opciones de personalización.

Tecnología

Los sistemas de hardware o software de una sede de la empresa pueden ser diferentes del resto. Desde el punto de vista tecnológico, hay varias razones para ello. Puede tratarse, por ejemplo, de una filial local que ha implantado un ERP diferente debido a restricciones presupuestarias.

O de un escenario en el que varias empresas o divisiones, pertenecientes al mismo grupo, trabajan como empresas separadas. También puede ser una empresa que ha sido comprada

El Modelo Operativo Objetivo debe contemplar estos escenarios y, si es necesario, debe pensarse en etapas. Analiza cuáles son las bases para empezar y cómo construir un sistema escalable. Aparte de cómo mejorar después con pasos incrementales y, por último, cómo alcanzar el objetivo final.

Personas

Es importante tener en cuenta que la implementación de SAP también puede ser sólo una parte del Modelo Operativo Objetivo. Podría, por ejemplo, ser una condición previa o podría haber varios cambios a implementar sin relación con SAP.

Por lo tanto, es necesario evaluar qué partes de nuestro objetivo dependen de SAP. Aparte de cómo afectarán estos cambios a la rentabilidad de la empresa. Por último, es importante comentar que el Modelo Operativo Objetivo suele ser un documento muy extenso.

A pesar de ello, es necesario poder exponer en qué ideas se basa. Por ejemplo “reaccionar a los cambios del mercado más rápido que la competencia” o “simplificar la cadena de suministro”. En resumen, son distintos los elementos que necesitamos para organizar correctamente la implantación de un ERP.

Entre ellos un motivo (por qué queremos hacerlo) y una visión de hacia dónde queremos ir (el Modelo Operativo Objetivo). También importa cuáles son los principios en los que se basará nuestro trabajo.